Las 10 cosas que nadie te ha dicho acerca de ser creativo
Roba como un artista. No copies, transforma.
- Austin Kleon
"Un buen poeta convierte su robo en un sentimiento único, completamente diferente de aquel que fue arrancado" T. S. Eliot
Todos los consejos son autobiográficos, cuando la gente da consejos, en realidad sólo está hablando con su yo del pasado.
Las ideas de este libro aplican para cualquier que trate de inyectar creatividad en su vida y en su trabajo.
No hay nada nuevo bajo el solo, todo el trabajo creativo surge de lo que ha existido antes, nada es completamente original.
Si nos liberamos de la carga de tratar de ser completamente originales, dejaremos de intentar hacer las cosas desde cero para asumir nuestras influencias en vez de huir de ellas.
Todas las nuevas ideas son una mezcla de una o más ideas previas.
Tienes una genealogía de ideas, no puedes escoger a tu familia pero sí a tus maestros y amigos, la música que escuchas, los libros que lees y las películas que ves.
Puedes construir los antecesores que inspiran el mundo que construyes para ti mismo.
Eres una mezcla de aquello que dejas entrar en tu vida. Eres la suma de tus influencias.
"Estamos formados y conformados por aquello que amamos"
El artista sólo colecciona cosas que de verdad le gustan.
Tu trabajo es recolectar buenas ideas. Mientras más buenas ideas colecciones, tendrás un espectro más amplio del cual puedes dejarte influir.
"Roba de cualquier lado que resuene con inspiración o que ponga en marcha tu imaginación. Devora películas viejas, películas nuevas, música, libros, pinturas, fotografías, poemas, sueños, conversaciones aleatorias, arquitectura, puentes, señalizaciones callejeras, árboles, nubes, luces y sombras. Roba sólo de las cosas que le hablen directamente a tu alma. Si haces esto, tu trabajo (y tu robo) serán auténticos." Jim Jarmusch
Empieza por alguien de tu disciplina que realmente te inspire, un modelo a seguir. Estudia todo lo que hay que saber acerca de esa persona. Después, encuentra tres personas que inspiraron a tu objeto de estudio y averigua todo sobre ellas.
Lo más genial de los maestros muertos o remotos es que no pueden negarte como un aprendiz. Puedes aprender lo que quieras de ellos. Dejaron sus planes de trabajo en sus obras.
Estés o no estés en la escuela, siempre será tu trabajo seguir educándote.
Debes tener curiosidad por el mundo en que vives. Buscar cosas. Perseguir cada referente. Ir más lejos que nadie. Así es como sacas ventaja.
Donde sea que vayas, siempre lleva contigo un cuaderno y un lapicero. Acostúmbrate a sacarlo y anotar todos tus pensamientos y observaciones. Copia de los libros tus pasajes favoritos.
Ten un archivo de robos, y corre a él cuando necesites inspiración.
Creando cosas y haciendo nuestro trabajo ayuda a encontrarnos a nosotros mismos.
Finge hasta que lo logres:
El mundo es un escenario. El trabajo creativo es una suerte de teatro. El escenario es tu escritorio. El disfraz es tu atuendo. La utilería es tu material. El libreto es el tiempo.
Nadie nace con estilo ni con voz. Al principio de nuestra vida, aprendemos imitando a nuestros héroes. Aprendemos copiando.
Primero debes saber a quién copiar. Segundo, qué copiar.
Le copias a tus héroes, la gente que quieres, la que te inspira, la gente como la que quieres ser
Cuando copias a tus héroes y su estilo es porque, de una forma u otra, lograr echarle un vistazo a su mente. Quieres interiorizar su forma de ver el mundo.
El momento en que fracasamos al copiar a nuestros héroes es cuando descubrimos qué es lo que nos hace únicos. Así es como evolucionamos.
Cópiale a tus héroes. ¿Qué hay ahí que te haga diferente? Eso es lo que debes ampliar y transformar en tu propio trabajo.
Hacemos arte porque nos gusta el arte.
Escribe el tipo de historia que más te gusta, la historia que quieres leer.
Cuando amamos una pieza de arte, queremos más desesperadamente. Nos encantan las secuelas. ¿Por qué no canalizar ese deseo en algo productivo?
Dibuja el arte que quieres ver, empieza el negocio que quieres administrar, toca la música que quieres oír, escribe los libros que quieres leer, crea los productos que quieres usar. Haz el trabajo que quieres que se haga.
"Llevo demasiado tiempo viendo los rectángulos brillosos de las pantallas de computadora. Hay que darle más tiempo a las cosas que se hacen en el mundo real"
Aunque amo mi computadora, creo que nos han robado el sentimiento de que estamos, en efecto, haciendo cosas. En vez de eso, siento que sólo tecleamos y damos clic en el mouse.
Necesitamos movernos, sentir que estamos haciendo algo con nuestro cuerpo, no sólo con la cabeza.
Practica la procrastinación productiva.
Los proyectos extras son los que realmente despegan. Me refiero a lo que haces solo por pasar el rato, cosas que solo son un juego. Ahí es donde sucede la magia.
Date el tiempo para aburrirte. La gente creativa necesita tiempo para sentarse a no hacer nada. Yo tengo algunas de mis mejores ideas cuando estoy aburrido, por eso nunca llevo mis camisas a la lavandería. Me encanta planchar; es tan aburrido que siempre me surgen buenas ideas. Si estás bloqueado, lava los platos. Toma una larga caminata. Mira fijamente una mancha en la pared.
Date tiempo para pasar el rato. Para perderte. Nunca sabes a dónde puedes llegar.
No desperdicies nada de ti mismo
Si tienes dos o tres verdaderas pasiones, no creas que tienes que escoger alguna. No las deseches. Quédate con todo lo que te apasiona.
Es importante tener un hobby; algo creativo que es sólo para ti. No tratas de ganar dinero ni volverte famoso por hacerlo, lo haces porque te hace feliz.
Al mundo no necesariamente le importa lo que tú pienses.
Cuando eres desconocido, no hay presión. Puedes hacer lo que quieras. Experimentar. Hacer cosas sólo por diversión. Cuando eres desconocido, no hay nada que te distraiga de ser mejor. No hay una imagen pública que cuidar o un cheque gigante en la cuerda floja.
Nunca más tendrás esa libertad cuando la gente empiece a prestarte atención, y mucho menos si empiezan a pagarte.
Sólo conozco una fórmula no tan secreta para darte a conocer: haz un buen trabajo y compártelo.
Cuando abres al público tu proceso creativo e invitas a la gente, aprendes mucho.
Internet es mucho más que un lugar para publicar tus ideas terminadas; puede funcionar como una incubadora de ideas que aún no están bien formadas, un lugar para desarrollar el trabajo que aún no has comenzado.
No tienes que compartir todo; de hecho, algunas veces es mejor no hacerlo. Muestra un poco de tu trabajo. Comparte un boceto o un fragmento, un vistazo de tu proceso. Piensa qué puedes compartir que tenga valor para los demás. Comparte un buen consejo, un link interesante. Menciona un buen libro.
Hay una comunidad de gente con quien puedes conectarte.
Rodéate de libros y de objetos que aprecias. Pega cosas a la pared. Crea tu propio mundo.
Todo lo que necesitas es un poco de espacio y un poco de tiempo; espacio para trabajar y tiempo para hacer algo. Una soledad autoimpuesta y un cautiverio temporal. Si tu situación en casa no te permite eso, a veces puedes encontrar soledad afuera, en lo salvaje.
Siempre cargo un libro, una pluma y un cuaderno de notas. Y siempre disfruto de mi soledad y de mi cautiverio temporal.
El lugar en el que escogemos vivir tiene mucho impacto sobre lo que creamos.
Tu cerebro entra en una zona de confort cuando se acostumbra a tu entorno. Necesitas incomodarlo. Necesitas pasar un tiempo en otras tierras, con gente que hace cosas diferentes a las que estás acostumbrado. Viajar hace que el mundo se vea nuevo, y cuando el mundo se ve nuevo, nuestro cerebro trabaja más.
También ayuda vivir rodeado de gente interesante, y no necesariamente de tu campo. La verdad me siento un poco snob cuando sólo me reúno con escritores y artistas, así que disfruto mucho de la compañía de cineastas, músicos y geeks de la tecnología. Y la comida… La comida debe ser buena. Debes encontrar un lugar que te alimente creativamente, socialmente, espiritualmente y… literalmente.
Sólo eres tan bueno como la gente que te rodea. En el mundo digital, esto significa seguir a las mejores personas; quienes sean más inteligentes y mejores que tú, aquellos que estén haciendo un trabajo excepcional.
Necesitarás:
Enójate. Pero no abras la boca y ponte a trabajar.
"Quéjate de lo mal que la gente hace software, haciendo software."
Andre Torrez
Recomiendo fan mail público. Internet es genial para esto. Escribe un post en tu blog acerca del trabajo de alguien que admiras y pon un enlace directo a su página de internet. Haz algo y dedícalo a tu héroe. Responde a una pregunta que haya hecho, resuelve algún problema que tenga, o mejora su trabajo y compártelo en la red.
Quizá tu héroe vea tu trabajo, quizá no. Quizá te responda, quizá no. Lo importante es que muestres tu aprecio sin esperar nada a cambio, y encuentres nueva inspiración.
No puedes ir por la vida buscando que fuentes externas te validen. Una vez que tu trabajo sea público, no tienes forma de controlar la reacción de la gente.
Ponte cómodo y acostúmbrate a ser malentendido, menospreciado, hasta ignorado. El truco es estar demasiado ocupado trabajando para que eso no te importe.
Que alguien hable bien de tu trabajo es un tremendo estímulo.
Sé violento y original en tu trabajo
Se necesita demasiada energía para ser creativo: nunca tendrás suficiente si la desperdicias en algo más.
Es mejor asumir que vivirás mucho tiempo. Así que come bien. Haz ejercicio. Camina. Duerme lo suficiente.
Aprende todo lo que necesites saber del dinero, lo más pronto posible.
"Hijo, no se trata del dinero que hagas sino del dinero que guardes." Haz un presupuesto. Vive dentro de tus posibilidades. Prepara tu lunch. Cuida los centavos. Ahorra lo más que puedas. Obtén la educación que necesitas de la forma más barata posible. El arte de ahorrar intenta decirle no a la cultura consumista. Decirle no a la comida rápida, a cafés de 40 pesos, y a esa computadora nueva cuando la que tienes funciona perfecto.
Un trabajo te da dinero, una conexión con el mundo y una rutina. La libertad del estrés financiero también significa libertad en tu arte.
Lo peor de un trabajo es que te quita tiempo, pero al menos te da una rutina establecida sobre la que puedes planear tiempos regulares para tus propósitos creativos. Establecer y mantener una rutina puede ser más importante que tener todo el tiempo del mundo. La inercia mata a la creatividad. Tienes que mantenerte en movimiento. Cuando caes en la rutina empiezas a alucinar tu trabajo porque sabes que, por un buen tiempo, va a apestar. Por lo menos hasta que te pongas de nuevo en movimiento.
Trabaja diario, sin importar nada. Sin días feriados, sin días de incapacidad. No te detengas.
Lo mejor que puedes hacer es comportarte como esquizofrénico y usar cada personalidad como refugio de la otra.
El truco es encontrar un trabajo que pague y no te haga vomitar sólo de pensar en él, que te deje la suficiente energía para hacer cosas en tu tiempo libre. Los trabajos ideales no son fáciles de encontrar pero están ahí afuera.
Amasar una cantidad considerable de trabajo o construir una carrera se trata, en gran parte, de la acumulación de esfuerzos a lo largo del tiempo.
Una bitácora es como un diario, pero sólo para los pequeños detalles. Es para registrar qué tan lejos has viajado.
"Si te preguntas: '¿Qué es lo mejor que te ha pasadohoy?', de hecho provocas en tu mente una retrospección alegre que se alimenta de acontecimientos recientes que de otra forma nunca recordarías. será un recuerdo agradable, una expresión poco común o algo particularmente delicioso."
En esta era de abundancia y sobreinformación, sobresaldrán quienes descifren qué dejar fuera para concentrarse en lo realmente importante. Nada paraliza más que la idea de posibilidades ilimitadas.
La mejor forma de superar el bloqueo creativo es ponerte restricciones. Parece contradictorio pero, cuando se trata de trabajo creativo, las limitaciones significan libertad.
No pongas excusas para no trabajar; haz cosas con el tiempo, espacio y materiales que tengas ahora.
Lo que nos hace interesantes no son sólo nuestras experiencias sino aquello que aún no hemos vivido.
Al final, la creatividad no es sólo aquello que usamos, es también aquello que decidimos no usar. Escoge sabiamente. Y diviértete.